Los Festejos del primer centenario de la consumación de la Independencia, nuevo impulso para el catolicismo social
DOI:
https://doi.org/10.35830/treh.vi52.1076Palabras clave:
Independencia Mexicana, conmemoracion, grupos católicosResumen
En septiembre de 1910 se celebró el primer centenario de la independencia,
apoteosis del propio Díaz; meses más tarde estallaba la Revolución. Con el
Plan de San Luís, México tuvo cierta estabilidad política y de paz, celebrándose
el centenario de la consumación de independencia en 1921, donde varios
grupos sociales se manifestaron. La Iglesia católica mexicana no fue ajena a
los acontecimientos relativos a este hecho histórico, rescatando su presencia.
La Revolución mexicana, con Madero, fue aprovechada por los católicos
sociales para conformar un partido político que se sumaba a los gremios
sindicales, cajas de ahorro, escuelas y prensa católica con los que recuperarían
parte de sus antiguas atribuciones. Con la muerte de Madero y la presencia
de Carranza para los católicos fue un duro golpe, frenándose sus proyectos
así como la expulsión del país de varios de sus dirigentes, no obstante sus
planes subsistieron en estas organizaciones. Al inicio de la década de los
veinte del siglo pasado, resurgió el catolicismo social en el país, con ello
retornaron los católicos exiliados y se reagruparon. Con las celebraciones
religiosas y los festejos del centenario de la consumación de independencia,
se apoderaron de espacios públicos dándole un nuevo impulso a su causa.
En este texto se abordan las diferentes acciones de los católicos sociales
radicales, también para tener un panorama más amplio de los festejos de la
consumación de independencia en 1921.